¿Y qué tan bueno es estar gordito o hermosa?
(Dr. Leonel Argüello Yrigoyen, médico epidemiólogo-director ejecutivo de PCI/miembro de la Federación Red NicaSalud)
Nuestro campesinado decía cuando miraba una muchacha delgada: “esa muchacha no va a tener marido ni hijos”. Los campesinos a veces tienen el patrón de mujer fuerte, como aquella mujer hermosa o gordita. Eso es incorrecto, pues sobrepeso y obesidad significan riesgo para su salud.
Los nicas estamos cambiando, no a la velocidad deseable, para que las mujeres gocen de los mismos derechos que los hombres. La ciencia evidencia que el tener un peso mayor al que nos corresponde por nuestra estatura es un factor de riesgo para padecer de diabetes o ¨azúcar en la sangre¨, hipertensión o presión alta, artritis o inflamación de las articulaciones, cáncer de mama y mayor riesgo cardiovascular o sea problemas en los vasos sanguíneos del corazón y del cerebro.
Nuestra comida está llena de grasa, fritos, mucha crema en vez de yogurt, mezclamos varios carbohidratos en el mismo plato, arroz, espagueti y papas. Además consumimos gaseosa donde un vaso tiene 12 cucharadas de azúcar, energía que no se utilizará y que se convierte en grasa. El agua es la mejor bebida para quitar la sed. No existe una política alimentaria nutricional para una alimentación sana y que nos ahorre enfermedades y gastos del bolsillo familiar y del estado.
Muchos jóvenes con pancita y adultos con la gran panza. Si la medimos por el ombligo la mujer no debe sobrepasar los 88 cm y el hombre los 102 cm. Si no es así, tendrán un riesgo cardiovascular mayor.
El plato donde servimos la comida debe dividirse en cuatro partes, las dos más grandes se llenan de granos y vegetales y las dos más pequeñas de frutas, proteínas. Fuera del plato, lo que equivaldría a un poquito menos del cuarto del plato la leche y derivados.
Mi mejor consejo: desayune como Rey, almuerce como Príncipe y cene como Mendigo, en otras palabras inicie el día con mayor cantidad y calidad y termínelo con menor cantidad y calidad de alimentación, ya que por la noche lo que coma se convierte en grasa porque no la usa de forma inmediata.
